
El uso de retinol está muy extendido en el ámbito de la cosmética. Este es un activo derivado de la vitamina A muy utilizado en el mundo de la belleza debido a sus numerosos beneficios para la piel
En este artículo te contamos en qué consiste este activo, para qué sirve, sus beneficios y contraindicaciones así como una posible regulación futura del concentrado de este en los productos cosméticos.
¿Qué es el retinol?
El retinol es un activo que deriva de la vitamina A y se caracteriza por ser capaz de transformar la piel. Esta vitamina es liposoluble, es decir, se disuelve en grasas, de forma que el cuerpo almacena el retinol, creando depósitos de esta sustancia para consumirlo en la parte del cuerpo que lo requiera. De este se resalta su importante papel en el desarrollo óseo y en la reparación celular entre otros aspectos.
Entre sus cualidades, destaca su capacidad de estimular la producción de colágeno y a su vez la disminución de la síntesis de melanina, dando como resultado una piel más tersa y homogénea.
El retinol, el cual como se mencionó anteriormente, es una forma activa de vitamina A que se encuentra de forma natural en alimentos que consumimos en nuestra dieta día a día, como pueden ser hígados animales y sus derivados, verduras de hoja verde (grelos, acelgas o espinacas), leche entera, zanahorias o bivalvos (berberechos, almejas o chirlas) entre otros alimentos.
¿Cuál es el uso de retinol?
El retinol es el aliado perfecto para combatir el fotoenvejecimiento o los signos de la edad. Este activo es el encargado de que la reparación celular se lleve a cabo de forma correcta, mediante la eliminación de la capa de la piel más superficial, la cual está formada por restos de células muertas las cuales suben a la superficie cutánea durante el ciclo de renovación. Tras esta eliminación de células muertas, deja paso a la reparación y renovación de la piel, la cual se produce de forma más efectiva, activando el funcionamiento citológico. De esta forma se consigue una piel más uniforme y radiante.
Pros y contras del uso de retinol
Pros
Uno de los beneficios del retinol es que es perfecto para combatir el envejecimiento cutáneo gracias a que estimula la producción natural de colágeno de la piel, combatiendo así la flacidez y el descolgamiento del óvalo facial y dando como resultado una piel más elástica y tersa.
Además de fomentar la producción de colágeno, también fomenta la producción de ácido hialurónico, lo cual da lugar a una correcta hidratación de la piel y de esta forma es de gran ayuda para retrasar la aparición de signos de la edad y arrugas.
Otro beneficio del retinol es que posee un poder despigmentante, de forma que elimina las células de la superficie cutánea sobrecargadas de melanina y así se consigue atenuar las manchas y unificar el tono de la piel.
Otro punto positivo para el retinol es su poder sobrerregulador, puesto que controla la producción de sebo y minimiza el tamaño de los poros, favoreciendo así a pieles mixtas o grasas.
Además de todas las ventajas mencionadas, el retinol es un antioxidante que alarga la vida de las células al reforzarlas y protegerlas de los efectos del sol o de la polución. De esta forma, proporciona luminosidad al rostro.
Contras
El retinol aunque tiene muchas cualidades también se le suma un contra y es que durante los primeros usos puede producir irritación, sequedad o picazón, lo que se traduce en rojeces, descamaciones… Pero es algo normal que puede sucederle a todas las personas y hay que ir poco a poco desarrollando tolerancia a este activo, lo que se conoce como proceso de retinización, de esta forma la piel se va haciendo al uso del retinol.
En todo este proceso es de vital importancia ir escuchando a la piel, comenzando a usar retinol pocas veces a la semana, una vez o dos e ir aumentando poco a poco según la piel lo vaya tolerando.
Posible regulación del retinol
Aunque no existe un límite legal en cuanto a concentraciones de este activo en productos cosméticos y dependiendo de su formulación estábamos utilizando productos con concentración de hasta el 1%. Las autoridades de la Unión Europea publicaron un borrador de una normativa para regular el porcentaje de concentración de este activo, debido a que muchos productos de belleza del mercado poseen altas y libres concentraciones.
En este borrador se expone que la concentración máxima de retinoides (excepto si hablamos de retinaldehido) en productos cosméticos sean de un 0,3% para productos faciales y un 0,05% en corporales
Hay que tener en cuenta que estos productos cosméticos que contienen retinol se presentan en forma de cremas o serúms y poseen diferentes concentraciones de este activo las cuales se puede ir aumentando según los niveles de tolerancia al mismo. Si este borrador de la normativa de la Comisión Europea se hace efectivo, las concentraciones de retinol en productos cosméticos, no médicos (por prescripción dermatológica), no podrían superar en sus fórmulas el 0,3% de retinol.